Muchas veces nos habéis preguntado, ¿Para qué sirven esos pequeños tornillos de ajuste que tiene la flauta entre las llaves? Pues bien, ahora os lo vamos a explicar
Generalmente el mecanismo se ajusta de dos maneras. La primera con los fieltros, de los cuales hablaremos en otro artículo, y la segunda con los tornillos de ajuste. Estos tornillos se encuentran situados en varios lugares de la flauta y lo más importante que debes saber es que, sobre todo si eres un alumno que acaba de comenzar, por tu bien no juegues con ellos.
Muchas veces queremos saber qué pasaría si los giro, seguro que hace sonar mejor la flauta o algo por el estilo… Pues nada más lejos de la realidad y te voy a contar lo que seguramente te ocurra si lo haces.
Un día mueves un tornillo y tocas, es probable que, si has tenido suerte, la flauta siga sonando por lo que te aventures a tocar uno o dos más y ¡Boom! la flauta ya dejó de sonar. Hecho esto dices, bueno pues los vuelvo a poner donde estaba pero.. ¿Cómo estaban colocados? No lo sabes y tanteas uno y otro, y de repente te das cuenta que la flauta tiene un aspecto parecido al siguiente.
En ese preciso momento, junto con un sudor frio, te preguntas que ha pasado y te das cuenta que tienes que llevarla para que alguien vea el desastre.
Normalmente cuando los clientes vienen diciendo que la flauta hay que ajustarla, se ve perfectamente si se han tocado los tornillos, por lo que es mejor que nos lo digáis antes para ahorrar un disgusto.
Con esto los que os quiero decir es simple, no toquéis los tornillos de ajuste ya que, moverlos muy poco puede hacer que se mueva mucho una llave y si encima movéis más de uno, puede ser una hecatombe.
¡Espero haberos ayudados a evitar males mayores!