Por Diego García
Cuando vendemos una flauta recordamos, sobre todo a los alumnos más jóvenes, la importancia de los cuidados de su instrumento para evitar pasar muchas veces por el taller de reparaciones.
Entre los problemas más habituales que nos encontramos en nuestro taller, destacan:
- Mover la corona de la cabeza, descolocando el corcho de su posición
- Tocar los tornillos de ajuste, haciendo que el mecanismo se desajuste.
- Utilizar productos no aptos para limpiar la flauta, que terminan por introducirse en el mecanismo y atascando los ejes.
- Doblar las llaves debido a un mal uso de la flauta.
- Dejar la flauta montada durante un largo periodo de tiempo. Esto produce que la suciedad y humedad se deposite en la flauta haciendo que se oxiden y deterioren los materiales.
- Golpes y roturas debido a caídas, en muchos casos por una mala colocación en atriles, sillas o camas.
Estos son algunos de los ejemplos a los que podemos unir, las flautas de segunda mano que dan muchos problemas de ajustes o las flautas low-cost cuya durabilidad es muy baja.
El único secreto que os puedo dar para que la flauta os dure más tiempo es, tomar nota de todos ellos y no realizar ninguno. Muchas veces no somos conscientes pero, la flauta es un instrumento bastante delicado aunque no lo parezca.
Para aquellos alumnos más pequeños, hay que enseñarles muy bien desde el principio como montar y coger la flauta, así como las partes más delicadas del mecanismo ya que, sabiendo esto serán más conscientes de sus cuidados. En este caso los padres y profesores tenemos un papel fundamental para ayudarles en los primeros pasos de limpieza y mantenimiento del instrumento.
Personalmente soy partidario de cuanto menos se repare una flauta, en mejor estado se encontrará. Yo con mi flauta, de más de 13 años, he realizado 4 reparaciones porque, aunque he tocado mucho, la he cuidado y no he tenido ningún problema. Lo normal es que si tocas bastante los fieltros de ajuste y zapatillas se vayan desgastando y en ese caso haya que cambiarlos.
Lo ideal es realizar revisiones periódicas, para comprobar el correcto ajuste de la flauta y en ese caso, el taller de confianza donde acudáis, tendrá que ser sincero para explicaros el estado de vuestro instrumento y comprobar si es necesario realizar alguna reparación.
No dudéis en visitarnos con vuestro instrumento para que hagamos una evaluación y comprobar su estado. Con toda confianza os diremos si es necesario realizar alguna reparación y sino, ¡Mejor, porque significará que se encuentra en buenas condiciones!
